Dienstag, 1. Dezember 2009

Mi amigo del Ferrari Capitalista


Tengo, o mas bien tuve , un conocido capitalista.
Lo sé , porque en las dos conversaciones que tuvimos solo comentó algo acerca de sus negocios, los vagos que creó el antiguo bloque comunista o por cuánto podía poner a alquiler su Ferrari blanco que sonaba como un reactor.
Por eso supe rápidamente su ojo para los business.
Ese chico, desapareció como la espuma de un mini mundo en el que me muevo en Berlín.
Tenía un restaurante de tapas y , después de 4 llamadas de su parte, nos dispusimos a probar sus especialidades.
La primera, en la frente. La tarde que habiamos quedado resulta que está en Mónaco. Claro, no podía estar en Moscú,estaba en la tierra de los ferraris.
Llegamos otro dia, porque al capitalista siempre se le dá otra oportunidad. Entonces nos puso platos para probar.
Eran platos de 2 Euros que vendía por 4. No ofrecía el placer de comer bien, sino un cambio monetario basado en números.
Resulta que como nos cayó bien, decidimos hacer allí una fiesta capitalista.
Llevamos unas 20 personas a un local por hacer ese cambio monetario. Ellos se gastaban 5 y nosotros recibíamos 0,50. Además, nos pagaba parte de la publicidad capitalista que hicimos.
La gente, tan acostumbrada a comer de forma capitalista, a bailar a cambio de dinero y a beber dando a cambio unidades monetarias no se dió ni cuenta. Magia capitalista.

Cómo no alegraban con la música, concentrados en sus números ni hacían felices a la gente con sus tapas porque no veían mas que cifras, los camareros estaban tristes y eran maleducados.
Todo acabó mas o menos bien, pero los números no cuadraron.

El chico capitalista aun nos debe 40 fichas de su juego. No responde a las cartas que le enviamos e incluso no atiende su teléfono , raro, porque en este caso son también números.
Estamos preocupados, el chico de la chistera, que vive en un rascacielo no aparece.
Supongo que va a buscar en otra ciudad esos cuarenta para poder devolverlos algún día a aquellos que nunca fuimos tan rápido.

En la proxima fiesta, apostaremos por la música.